Algunos virus tienen la capacidad de ir mutando, con la finalidad de mantener o mejorar sus capacidades infectivas. La familia de los coronavirus tiene una alta tasa de mutación, lo que le permite adaptarse fácilmente a nuevas condiciones. Se debe considerar que el virus irá cambiando durante los siguientes años y, como en el caso de la influenza, se deben de tener campañas de vacunación regulares contra las nuevas cepas.